La comunicación de la enfermedad, sus complicaciones, el avance y las decisiones posteriores, son momentos cruciales en la vida de las personas.
«En nuestra cultura, la vejez, la enfermedad y la muerte producen rechazo. La muerte y su proximidad son innombrables. La comunicación de la enfermedad, sus complicaciones, el avance y las decisiones posteriores, son momentos cruciales en la vida de las personas». Cada persona que cuida a otro que se encuentra en estado de enfermedad, en fase terminal, necesita comprender que la prioridad para éste son los temas relacionados con la ESPERANZA. En estos momentos del final de la vida, las personas se vuelven muy sensibles a los sentimientos de culpa y la depresión, por tal razón el cuidador debe concentrarse en dar ESPERANZA, del tipo que sea, para conseguir que el enfermo parta de este mundo en un estado mental lo más sereno posible. Las personas practicantes del Evangelio de Cristo saben con certeza que la Esperanza no es un mero sentimiento; la Esperanza es una persona con nombre propio y se llama JESÚS. Él, como Esperanza viva, hará que todos aquellos que confían en Él se mantengan firmes en la certeza de que no están solos, y de que la vida tiene un propósito aún más allá de la muerte.
Para aquellos cuidadores de pacientes con enfermedades en fases terminales, las siguientes recomendaciones serían oportunas:
1. Insista siempre en lo que la otra persona ha logrado y ha hecho bien.
2. Ayúdela a sentirse constructiva y satisfecha con su vida.
3. Ensalce sus virtudes y omita sus defectos.
Preguntas como las siguientes también podrían ayudar.
1. ¿Para qué estoy en el mundo?
2. ¿Qué sentido tiene mi existencia?
3. ¿Qué puedo esperar después de mi muerte?
4. ¿Qué sentido tiene el mundo?
5. ¿Para qué sufrir, o para qué luchar?
6. ¿Qué es lo que merece ser vivido?
7. ¿Cómo debo dotar de sentido mi vida?
8. ¿Qué vale la pena hacer?
En el Ministerio hospitalario hemos aprendido que la esencia de CUIDAR a otro en estado de enfermedad es el amor, un amor que se refleja a través del servicio, pero también por medio de LA ESCUCHA ACTIVA, lo cual es muy importante. ¡PODEMOS HACERLO!